Debo reconocer que deje El Gran Hotel Budapest de última, porque era la única película de las 8 nominadas al Oscar, que no quería ver. Como ya lo he dicho infinidad de veces, no me gustan las comedias estadounidenses, así que la deje en último lugar, porque simplemente me daba pereza sentarme a criticar los chistes flojos de actores sin gracia. Sin embargo hoy reconozco que la cinta me encanto y está entre mis favoritas para ganar el mayor galardón de la Academia el próximo domingo. Me equivoque en juzgar y lo admito.
Wes Anderson escribió (Inspirado en los escritos de Stefan Zweig) y dirigió una comedia de aventura bastante entretenida y mucho más profunda de los que parece. Anderson es un director que tiene muchos fans, pero también fuertes críticos que no dudan a la hora de apuntar hacia sus películas sin bondad alguna. Tengo varias películas de Anderson entre mis favoritas y The Grand Hotel Budapest pasa a ser una de ellas. Algo que destaca desde el comienzo del filme es el estilo personal del director, impregnado en otras películas.
Los colores usados en las diferentes escenas transmiten diferentes sentimientos dependiendo de la situación, aunque para la mayoría de espectadores en donde me incluyo, todo el colorido transfiere una ola de frescura y agrado visualmente hablando. Además este colorido excelsamente repartido a lo largo de los 100 minutos de duración, compaginan ágilmente con los hechos irracionales que ocurren dentro y fuera del hotel, provocando la risa del público. Yo no podía creer que me haya reído y gozado esta cinta, y me arrepiento de no haberla visto mucho antes.
El reparto se lució. No solo los principales, también los secundarios, porque imprimían ese toque picante y de humor que a todos se les exigía. Además hubo varios cameos de actores queridos por los amantes del cine, los cuales podrán ver en el mismo rol de conserjes. No les digo más, para no dañar la sorpresa. El dúo protagonista es una auténtica delicia en pantalla. Me sorprendió Ralph Fiennes con su interpretación de un carismático y fascinante conserje, casi un sabio conocedor de muchos temas, los cuales trata con educación y diplomacia. No se queda atrás el joven actor Tony Relovori, quien brilla con luz propia en su primer papel de importancia en el séptimo arte.
Es cierto que la cinta funciona como flashback, pero la narrativa que desde el primer minuto nos envuelve de una forma tan desmenuzada, clara y entretenida, hace que la película se pasa tan rápido, que nos hace olvidar por completo que se trata de una historia contada desde su protagonista. Me encanta cuando un libro o una película tratan la narrativa de forma que atrape al lector o espectador. Eso lo hizo muy bien The Grand Hotel Budapest y logro acaparar mi atención desde el inicio.
The Grand Hotel Budapest tiene unos planos increíbles en donde se nota la finura del director. Siempre componiendo de una forma perfecta las escenas y tomándolo todo con la cámara, para realzar la historia y la situación. Es una película que la familia puede ver un domingo, en donde tendrá risas garantizadas, sin embargo puede llegar a ser aburrida para algunos, porque en momentos tiende a ser lenta. No obstante es una obra magnifica llena de creatividad que se vislumbra plano a plano.
La trama rápidamente nos lleva a la estatua de un escritor que luego se representa en un escritor mayor, quien finalmente da a conocer la historia de Moustafa, dueño del famoso Grand Budapest. Moustafa es quien cuenta la historia de cómo se convirtió en el dueño del hotel, comenzando una serie de aventuras representadas por Zero Moustafa (Tony Revolori) quien se desempeña como botones y Monsieur Gustave H. (Ralph Fiennes), el conserje amado y respetado por todos los huéspedes. Es precisamente M. Gustave a quien acusan de asesinato y tiene que hacer uso de sus facultades intelectuales para salir de todo el rollo en el que lo metieron.
Anderson escribió la historia en colaboración con el ilustrador Hugo Guinness. Ellos ya habían trabajado en The Royal Tenembaums. El resultado es impredecible, porque hay tantos elementos juntos, tales como intrigas, conspiraciones, humor, diversión y entretenimiento, que el director envolvió todo lo anterior para mostrarnos un final triste, pero con sentido. No he visto todas las películas de Wes Anderson, pero me atrevo a decir que The Grand Hotel Budapest se convertirá en uno de sus clásicos.
Reparto: Ralph Fiennes (M. Gustave), F. Murray Abraham (Mr. Moustafa), Mathieu Amalric (Serge X), Adrien Brody (Dmitri), Willem Dafoe (Jopling), Jude Law (Young Writer), Bill Murray (M. Ivan), Edward Norton (Henckels), Saoirse Ronan (Agatha), Léa Seydoux (Clotilde), Tilda Swinton (Madame D.), Tom Wilkinson (Author), Owen Wilson (M. Chuck), Tony Revolori (Zero). Dirección: Wes Anderson (Moonrise Kingdom, Fantástico Sr. Fox, Academia Rushmore).
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