En varias oportunidades lo he dicho, me interesa bastante que la tecnología se enfoque en campos que hasta el momento ha explorado poco y en donde realmente necesitamos avances significativos, uno de ellos es la medicina, porque hay tecnología robótica interesante, pero los costos de adquisición y mantenimiento son altísimos, imposibles de implementar para hospitales regionales y grupos de médicos con énfasis filantrópicos.
Afortunadamente las impresoras 3D están abriendo un gran abanico de posibilidades alrededor de nuestro ambiente, porque se puede crear casi lo que se nos antoje, aunque el tiempo de producción es el mayor inconveniente, porque una impresión puede tardar varias horas, pero en algunos casos los costos pueden verse reducidos de forma importante, beneficiando a comunidades donde la pobreza u otros factores no permiten que accedan a esta tecnología.
Hoy se ha conocido que una ONG sin fines de lucro ubicada en California, conocida como Not Impossible, ha viajado hasta el país Africano de Sudán, con el fin de ayudar a los niños y jóvenes víctimas de la guerra que han perdido sus extremidades, esto gracias a las impresoras 3D, que permiten la producción de prótesis de bajo costo, exactamente 100 dólares.
La ONG quiere llevar esto mucho más allá y de la mano de su CEO, el señor Mick Ebeling, quiere convertir este desarrollo en una especie de campaña mundial, en donde se libera el código y demás parámetros de diseño, para que cualquier entidad de salud o usuario común pueda seguir ayudando a más personas que necesiten una prótesis. ¿Interesante verdad?
Si desean más información sobre este proyecto, puede hacerlo desde el link que dejo abajo.
Enlace: Not Impossible Labs.
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