Samsung presentó su nueva familia de tabletas de alta gama. Se trata de las Samsung Galaxy Tab S que contarán con bastantes novedades en cuanto a diseño y características. Desde un panel trasero con patrón perforado para que el tacto sea más agradable, hasta un sensor de huella dactilar similar al utilizado en el nuevo Samsung Galaxy S5.
Los colores disponibles desde el primer momento serán el gris titanio y el blanco brillante, dos colores que Samsung se ha encargado de popularizar siempre en sus modelos premium. El sensor de huellas dactilares estará incluido en el botón de inicio y permitirá mayor seguridad al desbloquear el dispositivo y abrir determinadas aplicaciones, algo similar a lo que pudimos ver en el Samsung Galaxy S5.
Los usuarios podrán realizar pagos a través de PayPal, iniciar sesión en Samsung Apps y hacer pagos in-app, entre otras cosas. Siempre pensando en la protección de nuestros datos y privacidad, permitiendo un uso más personalizado de todas las funciones de la tableta.
Otro detalle interesante, que de momento será exclusivo de las tabletas Samsung Galaxy Tab S, es el servicio de inicio multi-usuario nativo mediante deslizamiento de un dedo. Esto permitirá identificar al usuario en cuestión con su huella dactilar y así ingresar a su cuenta de usuario Android para no mezclar contenidos, aplicaciones y configuraciones. El sistema operativo será Android 4.4.2 KitKat.
Las tabletas llegarán en dos tamaños diferentes, 10,5 y 8,4 pulgadas. La pantalla será de plástico orgánico AMOLED y alcanzará una resolución máxima de 2560 x 1600 píxeles (WQXVGA). Habrá cuatro versiones diferentes, dos modelos 10,5 con conexión WiFi o WiFi + LTE-4G, y lo mismo para el de 8,4 pulgadas.
El procesador es un Exynos 5 de 8 núcleos, acompañado con 3 GB de memoria RAM y una tarjeta gráfica ARM Mali T628. ¿Estaremos ante el nuevo gigante de las tabletas de alta gama?
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