Desde pequeño soy admirador de Mario Moreno y su icónico personaje Cantinflas. El gusto por las películas del humorista mexicano se dio gracias a mis padres que siempre que tenían la oportunidad, nos olvidábamos de la realidad y nos encerrábamos a ver una de sus tantas cintas. El amor por el cine mexicano continua intacto y Colombia no es la excepción, ya que cuando murió el actor en 1993, una de las cadenas estatales le rindió homenaje cada domingo emitiendo en el horario de la tarde, la mayoría de su filmografía. Incluso en el 2014, Señal Colombia, el canal cultural de mi país, transmite una película de Cantinflas cada domingo.
Personalmente desde que vi el primer tráiler del filme que contaría la historia de Mario Moreno y el nacimiento de su personaje Cantinflas, me entusiasme y de inmediato desee que el proyecto estuviera a la altura del humorista. Todo comenzó bien, con la escogencia del actor protagónico, el español Óscar Jaenada. No es un secreto que su elección para este papel levanto polémica, ya que no es mexicano, sin embargo a mi parecer, no fue un simple imitador, por el contrario, se metió totalmente en el personaje e hizo que estuviéramos conectados con la chispa que caracterizaba al personaje.
Yo me quede con ganas de ver un desarrollo más profundo de Mario Moreno, muchas cosas se quedaron por fuera, quizá para no rivalizar con la familia y engrandecer aún más la leyenda de Cantinflas. Sin embargo la cinta queda debiendo, todo sucedía tan rápida que no daba tiempo de disfrutar los momentos, no había un contexto amplio en donde sabemos que se podía mostrar mucho más. En donde si hubo un trabajo más elaborado fue en el aspecto de fotografía y ambientación, en donde se logra captar y transportar al espectador a esa época en donde Don Mario Moreno luchaba por ser alguien.
Sabemos de todos los conflictos que tuvo el actor mexicano, aun así todo esto se dejó a un lado y se centró en el ascenso a la cima, solamente se mostraron algunos altibajos en su matrimonio con Valentina Ivanova. Ojala la película también la vean los jóvenes, ya que tal vez estos ignoren quien fue este personaje histórico no solo para México sino para el mundo, porque es parte de la historia cinematográfica Latinoamérica y de la comedia. Tanto fue el éxito de Cantinflas, que Charles Chaplin, uno de los más grandes cómicos en la historia del séptimo arte, aseguro que Mario Moreno era el mejor comediante del mundo, incluso por encima de él.
Cantinflas, la película, por momentos me hacía sentir que estaba en un documental y no en la biopic de Mario Moreno. ¿Por qué digo esto? Simplemente porque se enfocaron mucho en mostrar la imagen positiva de la vida de Cantinflas y poco en el lado “oscuro” que se llegó a conocer de él. Realmente lo que el director quería desde el comienzo, era mitificar al comediante, y lo logro de sobra. Aunque en eso ayudo bastante la actuación y caracterización de Jaenada, porque alcanzo la voz del comediante y revivir su estilo tan peculiar.
Tan solo briznas pudimos ver sobre las luchas sindicales o los diversos romances tan sonados en los medios de la época. En resumen, la película vale la pena por Jaenada, porque por parte de los actores secundarios, pudo decir que aportan poco, fue el español quien se cargó la cinta al hombro y llevo todo su peso. Aun así vayan a ver la biopic y recuerden el legado que dejo Cantinflas para todos los mexicanos y el resto del mundo.
Reparto: Óscar Jaenada (Mario Moreno – Cantinflas), Michael Imperioli (Michael Todd), Ilse Salas (Valentina Ivanova), Bárbara Mori (Elizabeth Taylor), Ana Layevska (Miroslava Stern), Luis Gerardo Méndez (Estanislao Shilinsky) Director: Sebastian del Amo (Cantinflas, El fantástico mundo de Juan Orol).