Cualquier usuario de teléfonos móviles posiblemente sepa que una de las cosas más difíciles de ser dueño de uno de estos objetos es la carga electrónica incesante que hay que hacerle a éstos para que funcionen. El problema con esto es que no sólo hay que tener cuidado con que no se gaste la carga sino también con evitar el desgaste de la batería y, por supuesto, encontrar el cargador y un enchufe para ponerlo en funcionamiento. Así es como la gente de la empresa MyCharge tuvo la solución a todos estos problemas y fabricó el MyCharge Freedom 2000, un pequeño dispositivo que carga tu iPhone desde el lugar menos pensado: la carcaza del móvil.
Pequeño y resistente
Esta carcaza alberga una potencia similar a la de la batería que viene con el iPhone, y provee de energía al móvil a medida que éste funciona, lo que nos permite al menos nueve horas de vida útil en constante uso. Además, su corteza de plástico duro y resistente ayuda a que el teléfono no se dañe si se cae de altas distancias o incluso si se moja (no recomendamos probar porque, recordemos, es un dispositivo eléctrico), pero lo único malo de esto es que este recubrimiento indestructible pesa bastante, algo que quizás puede llegar a serle molestia a aquellos usuarios que están acostumbrados a portar un iPhone ligero.
Para aquellos que se preguntan cómo es el interior de esta mágica carcaza, les hacemos notar que es de lo más seguro posible, recubierta de goma espuma y bordes redondeados para evitar accidentes. Increíblemente, la Freedom 2000 se carga mediante un pequeño puerto USB, y existe la posibilidad de tener cargando a tanto el iPhone como la carcaza al mismo tiempo, una herramienta que le puede llegar a servir a más de uno. Si ustedes creen que ya no es necesario llevarla consigo, la Freedom 2000 se puede sacar fácilmente y tener guardada para otra carga.
El producto se puede conseguir a 80 dólares en el sitio oficial de MyCharge.