Tener huertos caseros además de ser algo moderno es también una manera de traer beneficios a tu vida; algunos de estos beneficios son comida sana, reducción en el gasto, relajación y contacto con la naturaleza, aprendizaje sobre plantas que no conocías como pueden ser medicinales o gourmet y convivencia familiar.
No es en realidad algo utópico o complicado, pero sí requieres tener algunos conocimientos básicos para que tu huerto se un éxito.
¿Qué es lo que necesitas?
- Luz Solar: al menos 4 horas de luz solar directa.
- Toma de agua o sistema de riego: si pondrás tu huerto en un patio o jardín necesitas tener fácil acceso, ya sea una toma de agua cercana o idear un sistema de riego.
- Sustrato: la diferencia entre tierra simple y sustrato, es que el sustrato tiene suficiente cantidad de nutrientes orgánicos y fertilizantes que ayudarán a tus plantas a crecer, sin estos nutrientes la tierra no te servirá para tus plantas.
- Buena tierra: buena tierra y ésta la puedes mezclando materia orgánica: formada por desechos orgánicos como restos de frutas, o verduras –crudas o cocidas pero sin grasa-, tierra normal: sin resinas de árboles o desechos tóxicos, y jal, pirita o arena de rio; en un porcentaje de 30% 20% y 50% respectivamente.
¿En dónde puedo sembrar?
Comienza en piso o macetas, asegurándote de que la tierra en piso tenga al menos 40cm de profundiad y de tierra bien aereada, esto lo puedes lograr escavando con un tenedor para jardinería de modo que no se apelmace la tierra pues ello impide el crecimiento de las plantas.
- Macetas: deben tener una profundiad de 40cm y al menos 25 de ancho, las plantas sí pueden crecer en botes pequeños o de yogurt pero no te darán la misma producción que si les das espacio para crecer. Trata de conseguir macetas con algún sistema de riego especial como contenedor de agua por debajo para mantener la humedad.
¿Cómo hago composta?
La composta será una de las claves para que tus hortalizas estén en buen estado tanto protegidas de plagas cómo productivas.
-Tipos de composta y tamaño.
Dependiendo el espacio que tengas en casa será el tamaño de tu composta; lo primero es planear si la quieres hacer en piso o en algún bote o maceta, pero antes de ello es bueno comprender en qué consiste, cuáles son sus ingredientes y qué debes cuidar.
Es el nutriente principal y está compuesta por materia orgánica, que podemos clasificar en SECA y VERDE.
- SECA: Hojarasca, cartón ojo ¡sin tinta ni grasa!, palos, pedazos de madera, papel y servilletas, minerales como carbón o choncas de mar, aserrín.
- VERDE: Restos de frutas y verduras, cáscara de huevo, boslas de te, café de la cafetera.
- TIERRA: Necesitas tierra normal, ya sea de vivero o de tu mismo jardín. De tus posibilidades de espacio y cantidad de desperdicios que produzcas en casa.
-Preparación:
Harás una especie de sándwich, ya sea en piso o cubeta, la idea será siempre la misma, necesitas hacer un «sanwich» de tres capas, una sobre otra y puedes repetir la formula para agregar más capas.
- PRIMERA CAPA: compuesta por la materia SECA.
- SEGUNDA: Materia VERDE.
- TECERA: Es la que cubre la mezcla esta estará compuesta por la tierra de tu jardín o de vivero.
Estas deben estar en partes iguales de modo que des un equilibrio para evitar el exceso de humedad y por lo tanto la putrefacción, vigilando no añadir lácteos o grasa ya que esto favorecerá la producción de bastecerías no deseadas e insectos, sin dejar de lado el mal olor
-Como saber cuando está lista y qué debes vigilar:
Una vez que tengas tu sandiwch de composta, ciérrala muy bien si es en cubeta y procura que tenga agujeros tanto por arriba o debajo de esta; si es en piso cúbrela bien de tierra y espera; aproximadamente una semana para mover toda la mezcla, después deja reposar. Procura mezclarala una vez por semana y al cabo de aproximadamente 3 semanas debe estar lista.