Últimamente el show de televisión prácticamente infinito Los Simpsons viene explotando la típica introducción que solía tener, la variación del sketch del sofá que, actualmente, ha cambiado tanto que casi ni se menciona el sofá o la melodía clásica del programa. Como hacía ya bastante que tocaban temas mediáticos más modernos, entre ellos El Hobbit y la carrera de Guillermo Del Toro, ahora le tocaba el turno al cine bien antiguo, y es por eso que Matt Groening y compañía homenajeó a Disney haciendo que esta nueva intro luciese idéntica a uno de los cortos que se pasaban antes de los dibujos animados en la década de los ’30.
Una ciudad con las notas correctas
Este corto en cuestión es Music Ville, en donde la mayor parte de los personajes humanos veía alguna parte de su cuerpo reemplazada por un instrumento, y entre todos dejaban salir una muy dulce melodía que, obviamente, mantenía entretenido al espectador hasta el momento de inicio del film. Para el mundo simpsonesco, estos personajes se transformaron en los típicos habitantes de Springfield, incluyendo el Jefe Gorgory o mismo la ahora retirada Edna Krabappel. Y, como era de esperarse, Lisa es un saxofón, su instrumento favorito, que además luce muy bonito con los botones a los lados de la niña.
A diferencia de la mayoría de las intros del programa, ésta tiene una estructura dramática tradicional, comenzando por Lisa queriéndose sumar a un concierto de jazz, pero el malvado Señor Burns la secuestra y la obliga, junto al resto de su familia y los ciudadanos de Springfield, a interpretar la música clásica siniestra que éste desea ver reproducida. Sin embargo, es con el poder de la música alegre que los Simpson logran escapar de su prisión y hacer que Burns pague, enviándolo a Metal Ville (en donde se encuentran los abusivos de siempre, representados por guitarras eléctricas y demás). Como no podía faltar, la intro cierra con un mensaje de aceptación para todos, un lindo detalle que hace de estos minutos aún más adorables.