Hay conmoción en todo el mundo a raíz del secuestro de cientos de niñas en Nigeria. Más de 20 días hace que están secuestradas y los familiares de las víctimas ya temen lo peor. A medida que pasan los días aparecen aterradores testimonios que podrían indicar un final macabro para estas jóvenes que ya no sólo están en el centro de los reclamos en Nigeria, sino que en todo el mundo se han manifestado a favor de su liberación.
Boko Haram es el nombre del grupo extremista islámico que se adjudicó el secuestro de las 200 niñas para venderlas en el mercado negro. El grupo hace más de 10 años que lucha para evitar cualquier tipo de actividad asociada con Occidente en el marco de un conflicto que lleva siglos. El grupo además ha identificado al estado nigeriano como su enemigo debido a los tratos con países occidentales y por eso los objetivos más comunes de sus ataques son escuelas, iglesias y comitivas turísticas.
El gobierno de Estados Unidos se encuentra analizando el video de la milicia nigeriana en donde se adjudican la autoría del secuestro, mientras tanto la ONU ha salido a pedirle a la comunidad internacional una intervención inmediata para intentar rescatar a las más de 200 niñas que fueron secuestradas de una escuela en la localidad de Chibok.
El secuestro se llevó a cabo el 14 de Abril, desde ese día las niñas han sido sometidas a diferentes clases de abusos según se ha extraído de las declaraciones de algunas niñas que pudieron escapar luego de ser vendidas como esclavas.
No se conoce el número exacto de menores secuestradas, al principio las fuerzas policiales nigerianas indicaban 200 niñas, luego el ejército redujo la cifra a 129 pero los padres de las menores sostienen que habría al menos 234 niñas bajo el poder de la milicia.