Uno pensaría que una empresa haría lo posible para hacer que uno como consumidor utilice sus productos, no tanto advertir que nos mantengamos lejos de tales. Sin embargo, con la llegada inesperada y muy peligrosa del bug Zero-day, la gente de Microsoft no tuvo más remedio que armarse de toda forma posible en contra de esta malvada amenaza cibernética y, entre las medidas de defensa, la empresa advirtió que lo más conveniente para todos los usuarios de Internet Explorer será abandonar el explorador hasta que los técnicos puedan arreglar el problema de forma definitiva, no agregar constantes parches que sólo son una solución temporal a un problema persistente como este.
Ni siquiera es que podemos solucionar el problema instalando una versión antigua del explorador, ya que al parecer este bug afectó todas las instancias de Explorer, pero sólo ahora se advirtió de este inconveniente, algo que definitivamente le hace muchísimo honor al título permanente de «explorador más peligroso de la internet». Lo que hace este bug es permitir que cualquier hacker que tenga idea sobre esta falla acceda al navegador como si fuera el usuario mismo y robe todo tipo de datos, además permitiendo la instalación de malware y otras cosas altamente indeseadas. Aunque no estén apuntando exclusivamente a los usuarios caseros, se conoce que las víctimas principales de este bug son organizaciones económicas y de defensa.
El reporte de CNet sugiere que, si no son muy fanáticos de los demás exploradores, revisen las configuraciones internas de su copia de Internet Explorer y bloqueen el plugin Flash, ya que es por éste que entra en juego el bug y, a su vez, los hackers. También pueden utilizar el Modo Protegido, que generalmente ya desactiva Flash, o instalar una versión muy primitiva del explorador, pero eso último también genera gran problema porque muchos sitios y mismo el navegador hace crash cuando se le presenta una página moderna. Recomendamos saltar por el momento a un explorador diferente.